Aún recuerdo la frase de Saramago "un lágrima jamas emborronará un e-mail", así como Goytisolo hace poco dijo que escribe a mano porque es el tiempo justo que necesita para que baje la inspiración, es decir que la magia del papel y el lápiz aún persiste pero por el contrario no es nada incompatible con las nuevas tecnologías, que además de abrirsenn campo en el mundo educativo también esta tomando territorio en el mundo editorial.
Un libro se puede oler el libro antes de leerlo, palpar su solapa, subrayarlo, llevarlo para todas partes y leerlo sólo con el efecto de la luz natural o la luz de la vela, pero también se pone amarillento y se llena de polvo, tiene una vida útil y ocupan mucho espacio, Así que tanto fetichistas del libro impreso como apasionados de las nuevas tecnologías pueden hacer uso de ellos de la forma que lo deseen. Alguien decía que cuando saliera la televisión la radio se acabaría, pero en realidad ningún medio reemplaza a otro, simplemente lo complementa y da opciones a gentes con otras miradas.
Por otro lado, los e-book pueden ser la solución ecológica del papel, pero aún dependen de la electricidad. Sin embargo las editoriales on line si pueden ser la solucion para aquellos escritores que quieran dar a conocer su obra uno ejemplo: "La principal web literaria, Shanda, tiene 40 millones de usuarios independientes diarios y 700.000 personas han colgado sus escritos en ella. El negocio, además, cuadra: la lectura de la primera mitad del libro es gratis y el resto sale a 40 céntimos de euro por cada mil ideogramas. A veces, cuando un libro tiene éxito, se firma un contrato profesional con el autor".
Es decir que quienes hacen uso de internet y mientras siga teniendo una acceso libre, se está convirtiendo en el juez primero de las obras y puede ser él y no un grupo de 4 personas quienes decidan la calidad o la aceptación de las mismas y en realidad aquí radica la libertad de internet y el uso de las nuevas tecnologías en el poder de decisión.
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